Un primero
de enero pero de 1956, nacía en La Tigra, Chaco, un boxeador que se consagró
como el mejor de la categoría súper gallo entre fines de los setentas y
principios de los ochentas.
Debutó a
los 20 años en el campo rentado de los puños, en Pergamino (Buenos Aires),
venciendo en las tarjetas tras seis rounds. Fue el primer campeón argentino del
peso súper gallo en 1977, cuando derrotó por puntos a Arnoldo Agüero en el Luna
Park. Defendió su título cinco veces. Un año después se colgaría el cinturón
sudamericano de las 122 libras al vencer al uruguayo Hugo Melgarejo.
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Foto: Box Rec |
Llegaría el
momento de ir en busca del centro mundial. Fue el 15 de diciembre de 1979
cuando el argentino lo intentó por primera vez. Perdió por decisión unánime
ante el colombiano Ricardo Cardona en Barranquilla. No se dio por vencido y en
el noveno día del mes de agosto de 1980 le dio una paliza al entonces campeón
del mundo, el estadounidense Leo Randolph y luego de noquear en cinco asaltos en el Coliseum
de Spokane (Estados Unidos), llegó a la gloria, entró en la historia del
pugilismo argentino: se convirtió en campeón del mundo.
Defendió
exitosamente su cetro ante el dominicano
Leonardo Cruz, Ricardo Cardona (Colombia),
el tailandés Vichit Muangroi-et y los panameños Jorge Luján y Ulises Morales. En
su sexta presentación como mandamás súper gallo en 1982, perdió su título en la
revancha ante Cruz por puntos.
Desde ese
momento hasta el final de su carrera en 1990 ganó cuatro pelas, empató una y
perdió otra.
Su récord
nos dice que en 62 combates, se impuso en 52 (20 por KO), fue derrotado en
cinco e igualó en los restantes.
Hoy festeja sus 62 años, Sergio Víctor Palma.
¡Salud!
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